Japón 1998, en Tokio y Kioto, gracias a mi estancia por la recepción de la beca Picasso, se realizan estas dos exposiciones simultáneas. Spaces for vanishing (Espacios para desaparecer), en la Contemporary Art Factoty, en Tokio. Spaces for banishing, (Espacios para el destierro), en el espacio multicultural Nishijin Kitaza, en Kioto. Estas exposiciones contaron con la colaboración de la Embajada de España en Japón.
Vida asimétrica fue presentada en la exposición colectiva Disidencias comisariada por Natalia Bravo en la Sala Moreno Villa.
Esta obra consiste en la representación paradójica de una cama individual típica de establecimientos penitenciarios. El soporte/somier de la cama está realizado en hierro y sobre él se apoya un delgado colchón enfundado en tela de loneta y una almohada. La parte de los pies está sujeta a la pared por una cadena de eslabones metálicos, mientras que la parte del cabecero está sujeto mediante un cable que cuelga del techo de la estancia y que atraviesa la almohada, el colchón y el soporte metálico para iluminar con una simple bombilla la parte inferior del camastro.
Obra presentada en al Sala Cruce en la exposición individual La madriguera del espíritu. Fotografía. Cibachrome de 80 X 120 cm.
Obra presentada en al Sala Cruce en la exposición individual La madriguera del espíritu. Escultura/objeto. Cómoda de madera (desprovista de cajones) con encimera de mármol blanco donde se ha practicado un orificio a través del cual pasa un cable de luz terminado en lámpara incandescente de 100 W que ilumina el interior del mueble.
Obra presentada en al Sala Cruce en la exposición individual La madriguera del espíritu. Escultura. Almohada suspendida del muro. En ese elemento de reposo de la cabeza en las camas, se ha bordado a máquina de una línea de segmentos negros que divide en mitades desiguales la almohada.
Obra presentada en al Sala Cruce en la exposición individual La madriguera del espíritu que toma su título del de esta obra. Instalación. Acotación espacial de 500 x 400 x 400 cm con segmentos de hierro y dejando “entradas” al espacio acotado pero que en realidad impracticables para el cuerpo del espectador o porque resultan estrechas, demasiado altas o demasiado baja.
Obra presentada en al Sala Cruce en la exposición individual La madriguera del espíritu. Serie de 8 fotografías en blanco y negro de 25 x 40 cm dispuestas como un marco alrededor de un espacio vacío.
En un stand de una galería de la feria de arte ARCO, en 1997 se traza sobre el ángulo más interior una suerte de línea segmentos de espejo a modo de chaflán que recorren toda la verticalidad de la unión de los paramentos, dando lugar a una esquina que parece estar abierta hacia el otro lado.
Obra presentada por primera vez en al Sala Cruce en la exposición individual La madriguera del espíritu. Cabeza de esponja natural iluminada y sujeta por dos proyectores de diapositivas en modo autofocus. Mediante dos proyectores de diapositivas conectados en modo autofocus (modo de enfoque automático de la imagen en el que si no existe diapositiva no cesa de buscar la imagen para poder enfocarla), los objetivos de los aparatos sujetan y desplazan lateralmente una esponja natural que ha sido tallada con la forma de un rostro humanoide. Los objetivos de los proyectores no solo sujetan la esponja a veces presionándola hacia el centro y otras desplazándola lateralmente, sino que al mismo tiempo iluminan sus anfractuosidades.
Fotoacción realizada mediante técnica del fotomatón. Este trabajo fue propuesto y llevado a cabo convocatoria de 1996 del stand de la revista Aire, en ARCO 96, Madrid.
Para esta acción, cuyo resultado final es la obtención de una tira fotográfica, me introduzco en una máquina automática de disparo de fotografías para ser utilizadas en documentos como carnet de identidad, pasaportes, carnet de conducir, etc. Una vez realizados los 4 disparos reglados, salgo de la máquina y presento el resultado al que pongo el título de NO SIEMPRE. Mediante esta acción, en un ámbito que es el del reconocimiento de la identidad a través del reconocimiento del rostro en documentos oficiales; se trata pues de subvertir la presencialidad y la disponibilidad. No siempre hemos de estar disponibles, ni para todo el mundo ni siquiera para nuestras propias necesidades de exterioridad o del refrendo permanente de nuestra identidad, una categoría intelectual que nos somete a un histórico de acontecimientos pasados.